Les informamos que se considera una infracción al Reglamento de Viajeros fumar, vapear o llevar el cigarro encendido en los coches de Metro, Metro Ligero, escaleras mecánicas y dependencias que integran la red del Ferrocarril Metropolitano de Madrid. Gracias por su colaboración.
Cada último miércoles de abril se celebra el Día Internacional del Perro Guía, una jornada para reconocer la labor silenciosa y esencial que realizan estos animales junto a las personas con discapacidad visual. Gracias a su trabajo diario, cerca de mil personas pueden desplazarse con mayor seguridad y autonomía en su vida cotidiana.
En este día, queremos rendir homenaje a estos compañeros de cuatro patas, pero también visibilizar todo lo que hay detrás de su formación, su papel en la sociedad y cómo podemos contribuir, como ciudadanos, a facilitar su labor.
Un perro guía no es solo un animal de compañía. Está preparado para convertirse en los ojos de una persona ciega o con discapacidad visual grave, ayudándole a caminar por calles llenas de obstáculos, subir y bajar escaleras, cruzar pasos de peatones o acceder al transporte público con seguridad.
Para ello, estos perros reciben una formación muy completa que comienza desde cachorros. Durante los primeros meses de vida, viven con una familia educadora que les socializa y les enseña normas básicas de comportamiento. Después, pasan por una etapa de adiestramiento técnico con instructores especializados, donde aprenden habilidades clave como detectar bordillos, evitar obstáculos, encontrar puertas o frenar ante un peligro, incluso aunque el usuario le indique avanzar (lo que se llama “desobediencia inteligente”).
No todos los perros sirven para ser guía. Se necesita un equilibrio entre obediencia, serenidad, seguridad y sociabilidad.
La labor de la Fundación va más allá del adiestramiento: también ofrece seguimiento, asesoramiento técnico y apoyo emocional tanto al usuario como a las familias educadoras, que desempeñan un papel esencial durante los primeros meses de vida del cachorro.